El Ayuntamiento de Pujerra se encuentra acometiendo trabajos de mejora y rehabilitación de las fachadas exteriores del Museo de la Castaña, un espacio que fue inaugurado en el año 2012 con la finalidad de poner en valor y dar a conocer todo lo relacionado con el fruto más característico del Valle del Genal.
El alcalde de Pujerra, Francisco Macías, ha detallado que la actuación está consistiendo fundamentalmente en el picado, saneado y consolidación de los muros exteriores del inmueble, que está construido en piedra, dejando a la vista fragmentos de la fachada original para que se pueda apreciar el material tradicional de construcción.
Macías ha indicado que las obras de rehabilitación del Museo de la Castaña cuentan con financiación municipal y están siendo realizadas por trabajadores contratados a través de la Iniciativa para la Activación, Impulso y Recuperación del Empleo (AIRE), un programa impulsado por la Junta de Andalucía con el objetivo de ayudar a los ayuntamientos a paliar los efectos de la crisis económica y sanitaria derivada de la pandemia de Covid-19.
Este museo es pionero en España por utilizar la castaña como eje transversal para explicar muchos otros aspectos histórico-culturales de Pujerra y su entorno. Se da la circunstancia de que la castaña es una importante fuente de ingresos y, en ocasiones, el medio de vida de buena parte de la población del Valle del Genal.
El Museo de la Castaña se ubica en una típica casa pujerreña del centro de la localidad que está dividida en tres plantas y que fue rehabilitada por el Ayuntamiento, proceso que terminó en el año 2009. En la planta baja del edificio se halla el punto de información turística que incluye recepción, tienda y espacio expositivo dedicado a la castaña y a su historia en cuanto a trabajo, métodos de recolección, comercio y diferentes formas de consumo. En esta planta también se sitúa un precioso patio. En las dos plantas superiores se recrea una vivienda típica pujerreña de tiempos pasados; en la primera se encuentra la cocina, el salón y el dormitorio y en la segunda hay instalado un amplio espacio expositivo y un desván en el que puede observarse un pajar como los que antaño había en la mayoría de las casas.
La estructura del edificio, los techos de madera y la gran cantidad de detalles que guarda el Museo de la Castaña, construido con materiales tradicionales y equipado con muebles y enseres de época así como con aparejos del campo, lo convierten en un lugar con encanto, original y sorprendente.
