Aparecen nuevos restos arqueológicos en el Barrio de San Francisco. En esta ocasión, como consecuencia de las obras de construcción de un inmueble situado entre la calle Torrejones y calle Empedrada, han salido a la luz una serie de restos óseos que datan del periodo de ocupación árabe. Se trata de unos diez enterramientos de personas, cuyos esqueletos han permanecido en un estado de conservación aceptable, a pesar de los siglos que han pasado por ellos.
Los restos que se encuentran a escasa profundidad, tras las dos capas de solería de las viviendas anteriores y pertenecen a la necrópolis que estaba situada en aquella época en esta zona. De hecho, es frecuente que cuando se realizan obras en esta barriada aparezcan este tipo de vestigios.
Se da la circunstancia de que los diez esqueletos se encuentran enterrados de cúbito lateral y mirando hacia La Meca (Este-Sureste).
Dos de estos esqueletos pertenecen, según los primeros datos obtenidos hasta el momento, a niños que tenían unas edades comprendidas entre los 7 y 8 años, el primero, y entre los 3 y 4 años el segundo.
También, durante las excavaciones que se están realizando en el solar, ha sido encontrada una moneda, aunque hasta el momento no se ha podido fijar su fecha, debido a que se encuentra bastante deteriorada y debe ser limpiada con productos apropiados para su identificación.
Los restos, una vez que finalicen los trabajos, pasarán a formar a engrosar los recursos del Museo Municipal de Ronda, situado en el el Palacio de Mondragón.