Agentes de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía peinan estos días el Valle del Genal ante la presencia de huevos de la avispilla en las yemas de algunos castaños, un insecto que tiene en vilo a los agricultores desde la pasada primavera.
Los agentes han encontrado larvas de avispilla en árboles situados en los términos municipales de Igualeja, Parauta y Pujerra, aunque no en grandes extensiones de terreno, según se ha indicado desde la Junta de Andalucía. El gobierno autonómico ha iniciado las medidas para tratar de frenar esta plaga, que ha arrasado el castañar en Italia. Para ello, hace unos días soltaba en Ojén ejemplares del parasitoide Torymus, un insecto que es el depredador natural de la avispilla, aunque del que se desconoce el efecto que tendrá para el sistema ambiental de la zona.
Precisamente sobre este asunto informaban ayer tarde las diputadas provinciales del PP Marina Bravo y Leonor García-Agua, responsables de Medio Ambiente y Agricultura respectivamente. Junto a ellas la presidenta del PP de Ronda y alcaldesa de la ciudad, Maripaz Fernández junto a los candidatos del PP de la Serranía de Ronda, en una rueda de prensa ofrecida en la sede de este partido. Fernández daba la bienvenida a los asistentes y se sumaba a la petición de que la Junta de Andalucía tenga celeridad para acabar con la avispilla que afecta a los castaños de la zona del Alto Genal, sector del que vive el 90 por ciento de la población.
En este mismo sentido se pronunciaba Marina Bravo. La responsable de Medio Ambiente de la Diputación de Málaga, insistiendo en la necesidad de actuar. En concreto, el PP apuesta por la depredación biológica, introduciendo otra especie que acabaría con la avispilla; y han rechazado la tala de los castaños que ya pudieran estar afectados por esta plaga.
Los alcaldes y candidatos del PP de la zona han destacado que los vecinos están muy preocupados por esta plaga. Son muchas las familias que viven de la castaña, por lo que urge una solución lo antes posible, ha apuntado Bravo, que ha señalado que tanto la Diputación como los ayuntamientos se ofrecen a colaborar con la Junta de Andalucía en la búsqueda de una solución.
Tanto Bravo como Leonor García-Agua, y los alcaldes y candidatos de la zona, mantenían una reunión para analizar este problema medioambiental. Las diputadas provinciales ponían como ejemplo lo hecho en Galicia apuntando que la presencia de la plaga es un hecho y que podrían tardarse hasta diez años en controlarla totalmente teniendo como ejemplo lo ocurrido en otros países como Italia o Francia.