Según se informa en una nota de prensa de la Consejería de Medio Ambiente, la eliminación de esta planta invasora ha supuesto la recuperación de forma casi inmediata de especies autóctonas, y se han localizado ejemplares tanto en fase adulta como juvenil y larvaria de especies como la salamandra, el tritón pigmeo o la culebra de agua, entre otros. Según Medio Ambiente, esta actuación tiene, además, un carácter preventivo si se tiene en consideración la conexión con otros cursos de agua de pequeño tamaño y de éstos con el río Guadiaro, situado a unos 400 metros, ya que sirve para evitar la dispersión potencial a otros cauces naturales próximos, cuya invasión podría haber generado serios impactos medioambientales y socioeconómicos. El jacinto de agua está considerada por como una de las cien especies invasoras más peligrosas.