Así que el mensaje de la Policía es claro: se pide nuevamente a los vecinos de Ronda que observen alguna práctica en el alumbrado público que lo comunique, para que la Policía Local pueda comprobar que son técnicos autorizados, y es que el modus operandi de quienes realizan estos hurtos de cable, como les venimos contando, es siempre el mismo: visten como técnicos, por la mañana cortan los cables del alumbrado público aprovechando que no hay luz y lo sustraen por la noche.
Los daños están siendo cuantiosos. Así que la Policía anuncia que hay ya dispositivos especiales de seguridad entre todos los cuerpos de seguridad vigilando zonas especialmente sensibles.
Carrasco se ha referido también a otros dispositivos también puestos en marcha por la policía. Por ejemplo, otro derivado del aumento también significativo de denuncias por hurtos al descuido de carteras y bolsos en la zona comercial de la ciudad.
Desde la Policía Local se ha vuelto a subrayar que agentes de paisano están por las calles para evitar estos casos. Y además, en Ronda de Mañana, el Oficial Antonio Morales, ha dicho que hay recomendaciones sencillas que pueden servir de mucho: en mercadillos y aglomeraciones hay que dejar el bolso siempre cerrado y nunca debe colocarse en la espalda, entre otros consejos. Porque después, como apostilla el Jefe de la Policía, actuar es muy difícil.
El Jefe de la Policía Local, nos ha informado que entre los próximos días 7 y 13 de este mes, la Policía Local colaborará con la DGT en la compaña de control del uso del casco en motocicletas, ciclomotores y quads. Dice que en Ronda las denuncias por no llevar el casco son muy raras, y el comportamiento suele ser adecuado.
No como el del conductor cuyo caso les contamos. Un hombre que, en estado de embriaguez, llegó a dormirse en su coche cuando circulaba por el centro de Ronda. José Carrasco, se ha referido a este caso, ha dicho que todo ocurrió tras que una patrulla policial viera como el coche que iba delante de ellos se paró en seco en mitad de la calle.
Concretamente en la calle Villanueva, a las 3 de la madrugada del lunes. El coche quedó parado, con las luces encendidas en mitad de la calle. El conductor, un hombre de 59 años de edad y natural de Ronda, estaba completamente dormido en el asiento.
Tras que se hiciera la prueba de alcoholemia, el hombre daba una tasa de 0,94, casi cuatro veces más de lo que permite la nueva Ley de Tráfico, por lo que en un principio fue detenido y el vehículo quedó inmovilizado.
El conductor ha sido acusado de un presunto delito contra la seguridad del tráfico y podría enfrentarse a la pérdida de seis puntos, una multa que va desde los 500 a 1.800 euros y entre ocho meses y un año de trabajos comunitarios para la sociedad.
Según informa hoy La Opinión de Málaga, la Policía Local inspecciona cada semana unos 200 vehículos y realiza controles de alcoholemia a unos 50 de ellos, dando positivo en las tasas tan sólo un 1% de los conductores.