La fecha para el inicio de la campaña se mantiene en torno al quince de septiembre para las variedades más tempranas en zonas como Jubrique, Cartajima o Genalguacil.
El sector de la castaña del Valle del Genal se encuentra preocupado ya se teme que las continuas olas de calor de este verano puedan afectar a la campaña que comenzará a recolectarse en octubre. El descenso en la producción podría alcanzar un 50 por ciento, según COAG Andalucía si siguen estas las temperaturas “la caída será aún mayor”. Si no, se trataría de una de las mejores cosechas de los últimos años a pesar de las pocas lluvias que se han producido en este año. Francisco Boza es responsable de COAG Andalucía.
Boza ha insistido en que la producción este año puede variar mucho dependiendo del tiempo que nos acompañe en las próximas semanas.
Desde COAG se destaca que la incidencia de la avispilla ha sido menor de lo esperado este año aunque se espera que en años próximos la cosa cambie y que sean “años duros” para el sector de la castaña en el Valle del Genal.
Se espera, según Boza, que el Ministerio de Medio Ambiente autorice la suelta del Torymus, el depredador de la avispilla. Por ahora sólo se ha podido cortar y quemar las ramas afectadas. En torno a 1.200 árboles, según cálculos de COAG, han resultado ya afectados.
El responsable de esta organización agroganadera ha señalado también que es necesario que esa medida se aplique pronto, dado que ahora el sector está viviendo un buen momento ya que los castañares europeos se han resistido por el ataque de la avispilla y existe una buena demanda para la castaña de la Serranía. En caso contrario, ha dicho también, que podría suponer la muerte del sector y consecuentemente de los municipios del Genal cuya economía depende de este cultivo.