Los representantes alemanes han permanecido todo el fin de semana en la Serranía, por lo que además de visitar la feria de Montejaque, que se celebra estos días, han acudido al acto de inauguración de la recientemente reformada Avenida Knittlingen del municipio malagueño; y al acto oficial de hermanamiento de ambas localidades, que ya se celebró el pasado junio en Alemania y ahora ha tenido lugar en Montejaque, donde se ha firmado un pergamino en el que se da fe del hermanamiento con este pueblo y con su vecino Benaoján.
El presidente de la Diputación estuvo presente en la celebración de este hermanamiento, junto a los alcaldes de Montejaque y Benaoján, Miguel Alza y Francisco Gómez; y el alcalde de Knittlingen.
Este año, además, se ha hecho un homenaje a los jóvenes malagueños que se trasladaron a Knittlingen y que se han integrado perfectamente en el país de acogida. Se calcula que actualmente residen en la localidad alemana unos cincuenta o sesenta montejaqueños, aunque en años pasados la cifra llegó a más de cuatrocientos.