Decía Clara Aguilera, que el Centro Integral del Vino y la Viña pretende ser referente en su comarca sobre vitivinicultura y enología y, entre otras actuaciones, se contempla impulsar la formación y la transferencia de tecnología y conocimientos a los profesionales del sector; divulgar la cultura del vino y promocionar los excelentes caldos de la Serranía de Ronda, y dinamizar la actividad de este sector para el fomento de la innovación, la investigación, la calidad y la comercialización. Asimismo, la titular de Agricultura decía que se se aprovecharán de forma especial las oportunidades derivadas de la unión entre vinicultura y turismo integrando el mundo del vino en la planificación turística de esta comarca.
Por su parte el alcalde de Ronda, Antonio Marín Lara, agradecía la visita de la consejera y recordaba que la Comarca de Ronda supone actualmente el 63% de las bodegas que hay en la provincia. Según datos de la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía, en la zona hay 14 bodegas de las que 11 pertenecen a la Asociación de Viticultores de la Serranía Vinos de Ronda y otras 4 se están implantando. Las instalaciones cuentan con 14 enólogos y 60 trabajadores fijos y generan 9.000 peonadas anuales.
En este sentido, decía Clara Aguilera que el vino en Ronda es un “sector emergente pero poderoso”, con productos que cuentan ya con prestigio nacional e internacional que es fruto, indicaba la consejera, del trabajo de los empresarios de Ronda. Por ello, la consejera de Agricultura felicitaba a los bodegueros y viticultores rondeños.
Después de la firma del protocolo de colaboración entre Junta de Andalucía y Ayuntamiento, se ha realizado una visita al antiguo depósito de aguas de Ronda donde irá ubicado el Centro Integral del Vino y la Viña. Este aljibe fue construido a finales del siglo XIX, y cuenta dos grandes salas con columnas de gran valor patrimonial para la ciudad. Las nuevas instalaciones contarán con una bodega experimental, una tienda para vinos de la zona, una sala de catas, cuatro aulas de formación y un centro de interpretación del vino.
En la última década, la vitivinicultura ha experimentado un significativo auge en la Serranía de Ronda, con una superficie de 240 hectáreas, prácticamente toda inscrita en el Consejo Regulador de la Denominación de Origen ‘Sierras de Málaga’, y una producción de 850.000 botellas de vino al año (90% de tintos y 10% de rosados y blancos de calidad). Las variedades de uva que se cultivan en la zona son syrah, garnacha, tempranillo, cabernet, sauvignon, merlot, petit verdot, pinot noir y chardonay. Asimismo se está experimentando con las variedades autóctonas como melonera, tintilla de rota y romé, y otras foráneas.