El Pleno da luz verde al proyecto de ampliación y mejora de las instalaciones deportivas de la escuela de equitación que la Real Maestranza de Caballería tiene junto a los baños árabes, una intervención que se plantea a finales de 2015 y que recibía semanas atrás el último informe favorable por parte de la Delegación Provincial de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio.
La actuación pretende consolidar la actividad que la escuela comenzó en 2004, reconocida a nivel internacional, y cuya ampliación prevé la creación de 22 nuevos puestos de trabajo y una inversión cercana al millón de euros. Según explicaba el delegado municipal de Obras y Urbanismo, Francisco Márquez, el proyecto contempla la sustitución de la cubierta de chapa actual de las cuadras por una de teja árabe tradicional, así como la construcción entre otras de dos nuevas dependencias para eliminar los boxes prefabricados.
El punto salió adelante por mayoría con la abstención de IU y del PP. La portavoz del grupo municipal popular, Mª Paz Fernández, advertía que aunque el expediente cuenta con los parabienes de la Consejería de Cultura y Medio Ambiente, existe un informe con reparos por parte del arqueólogo municipal, por lo que preferían abstenerse “por precaución”. El resto de grupos y la propia alcaldesa insistieron en que dicho informe no es vinculante, y que se trata de una actuación “beneficiosa para la Maestranza y para Ronda”.
La sesión permitió además aprobar dos reconocimientos extrajudiciales de crédito por facturas de ejercicios anteriores. El primero por valor de 39.800 euros y un segundo, recogido en otro punto porque las facturas presentaban diferentes reparos, en este caso por un valor menor a 1.000€. Ambos puntos se aprobaron con la abstención de PP y APR.
Asimismo salió adelante un expediente de modificación de crédito en base a los remanentes de inversión disponibles. Según explicaba el delegado municipal de Economía y Hacienda, Álvaro Carreño, de los 124.000 euros dispuestos el año pasado se retraen algo más de 32.600€ para mejorar la luminaria y sustituirla por leds desde el barrio de San Francisco hasta el nuevo hospital. Se aprueba por unanimidad del Pleno salvo la abstención del PP, que no se opone a la actuación, sino a que se utilice para ello los aprovechamientos urbanísticos de los Merinos, cuando hay una sentencia firme de devolución.
Otro asunto que generó un amplio debate fue el referente al impuesto sobre el Incremento de Valor de los Terrenos Urbanos, la conocida como plusvalía municipal, que recordemos se prevé que se anulará para aquellos ciudadanos que hayan vendido su vivienda sin beneficios. Finalmente el PSOE retiró su moción al conocer que la FEMP ha solicitado la creación de una comisión de expertos para estudiar con el Gobierno central una solución legislativa que garantice la financiación de los ayuntamientos. El PP mantuvo su moción al entender que el Ayuntamiento debe dar respuesta a las inquietudes ciudadanas, propuesta que sólo contó con el apoyo de APR en algunos de los puntos. El resto de grupos se opuso por considerar que no es el momento, ya que la sentencia aún no es extensiva a todos los ayuntamientos españoles. Con todo, el delegado Economía ha insistido en que cualquier persona interesada puede acudir al Departamento de Renta para informarse y reclamar.
Concluido el orden del día se dio paso a los ciudadanos, que durante más de una hora centraron el debate principalmente en las posibles restricciones de tráfico en el Puente Nuevo. Un buen número de empresarios del barrio de San Francisco acudió al Pleno para mostrar su rechazo al corte realizado durante el pasado fin de semana con motivo del HOLE, que consideran excesivo y que, según explicaron, ha supuesto importantes pérdidas para los negocios de la zona. Además quieren saber qué alternativas se van a proponer cuando se restrinja la circulación por el conjunto histórico.
La alcaldesa alegó cuestiones de seguridad para justificar el corte del fin de semana, insistiendo en que fue una medida puntual que nada tiene que ver con las actuaciones que se están estudiando desde el grupo de trabajo de Patrimonio Histórico, en el que están representados 38 colectivos y de cuyas propuestas saldrá la decisión definitiva sobre lo que se va a hacer.