Fernández dice en esa entrevista que todos los días se lleva alguna vez las manos a la cabeza por la difícil situación en el Ayuntamiento, difícil situación económica y también de organización. Habla de empezar de cero ante un Ayuntamiento que califica de “desastre”, cuya estructura hay que cambiar desde los cimientos, asegura.
Dice que reflotará la economía municipal reduciendo gastos innecesarios, y habla además del ahorro de 400 MIL euros en cargos de gobierno, la puesta en marcha de una central de compras para evitar el descontrol o la limitación de uso de móvil o el no uso del coche oficial.
Según Fernández, el PSOE había convertido el Ayuntamiento en una agencia de colocación, y habla de un tiempo político nuevo tras años de oscurantismo y falta de transparencia.
Dice Fernández que en Ronda se ha demostrado que el Partido Popular puede gobernar en los pueblos del interior, y que esa necesidad de cambio tras años de olvido del Gobierno de la Junta servirá para que se produzcan también cambios de Gobierno en Madrid y en Sevilla a favor del Partido Popular.
Fernández habla de potenciar el turismo mediante políticas serias (califica las anteriormente llevadas a cabo como “políticas de segunda”); dice que sin intentar competir con la costa, la tercera ciudad más visitada de Andalucía tiene que tener un modelo propio.
Dentro de cuatro años, Fernández dice que imagina una Ronda mejor: con mejores comunicaciones, nombrada Patrimonio de la Humanidad, una ciudad universitaria y donde sus trabajadores no tengan que marcharse de aquí para buscar trabajo.